GRETEL
&
IRWING

En una etapa de nuestras vidas donde todo era un caos, incluyéndonos a nosotros mismos, y en medio de una pandemia, donde el encierro y otros factores nos hicieron caer en una rebeldía por salir de él, comenzó nuestra historia...

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No es una historia tan romántica como para decir que fue amor a primera vista, o que sabíamos desde un principio que éramos los indicados. Pero así es como se hacen las historias reales, llenas de imperfecciones, con malas decisiones que traen buenas enseñanzas o con decisiones que, a ojos de otros, parecen incorrectas.

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Buscando diversión en bares clandestinos que abrían evadiendo todas las restricciones sanitarias, Irwing y yo nos conocimos. Nuestra historia comienza como la de dos personas que no buscaban amor, o al menos no conscientemente, sino como dos personas que querían evadir la soledad con momentos de placer y diversión.

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Con el tiempo, y después de varias salidas, encontré en él a un hombre con muchos valores y una forma de ver el mundo parecida a la mía, alguien que en muy poco tiempo podía describirme, por dentro y por fuera.

Mentiría si dijera que todo fue o es perfecto, pero, en definitiva, para mí el amor verdadero es mostrar tus monstruos más oscuros y que la otra persona los conozca y trabajar sobre ellos, no solo sobre lo bueno, porque eso siempre va a estar ahí.

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Y despues de ya 3 años viviendo juntos, puedo decir con toda franqueza que Gretel es el amor de mi vida, y la mujer que quiero para compartir el resto de esta misma hasta mi ultimo suspiro.

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Quien te haga valorar la vida, sorprenderte de ella y querer todos los dias ser la mejor version que puedas como hombre y persona, siempre sera la indicada, ya que no solo busca a quien pueda complacerle en las cosas buenas, si no como ella dice, quien pueda acompañarte en tus peores momentos.

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Como un viejo dicho de todos los que digo... quien no pueda con tus peores momentos, definitivamente no merece los mejores.